LA ESCUELA DE MENTORING EMPRESARIO

23 abril, 2010


El viernes 16 de Abril de 2010 comenzó sus actividades,
el 1er cuatrimestre de La Escuela de Mentoring Empresario

Las actividades se realizan en el Hotel Four Seasons
de la ciudad de Buenos Aires, Argentina. Continúa...


LOS 8 CONSEJOS PARA FUNDIR CUANTO ANTES A SU EMPRESA

06 abril, 2010

LOS 8 CONSEJOS PARA FUNDIR CUANTO ANTES A SU EMPRESA

Un padre que da consejos, más que padre es un amigo.
Jose Hernández en Martín Fierro,



Si bien desde Mentoring Empresario, ocupamos muchas veces el lugar del padre, del tutor, del encargado, por lo general no damos consejos.
Explicamos, si, enseñamos, si, tratamos de que el cliente no tropiece dos veces con la misma piedra.
Por lo general nuestros clientes saben escuchar y oír, (si no, nuestro trabajo es explicar una y otra vez), entonces conseguimos variar rumbos que pueden llevar indefectiblemente a la desintegración de la Empresa, y asi conseguir, sin querer pero queriendo, a organizar la Empresa y la Familia de convertirse en “de obreros a obreros en tres generaciones”.
Hoy hemos decidido decir lo mismo que decimos siempre, pero rompiendo nuestra tradición, hacerlo con consejos, serios consejos, pero para que paradojalmente se pueda inferir que es lo que se debe evitar de hacer.

  • 1.- No delegue. Realice todo solo.
    Porque no hay nadie mejor que usted para hacer las cosas. Usted “ya se las conoce todas” y es el ser más eficiente, más inteligente y más rápido sobre la tierra. Nadie conoce mejor su mercadería, su forma de tratar a la gente, como comprar, como vender. Cuánto crédito dar, a quién, aunque se equivoque y pierda una fortuna. Pero como está solo y nadie lo observa o puede criticarle, lo podrá disimular muy bien.


  • 2. Traiga muchos familiares a su empresa. Son TODOS confiables.
    Nadie le va a distraer un peso, y tráigalos aunque no entiendan ni les importe entender su trabajo. Traiga a su esposa para que le “ayude”, agregue a su sobrino porque a su hermana le molesta verlo en la cama todo el día. Traiga a su hijo y dele labores ínfimas “para que se haga desde abajo”, aunque sea un rico heredero (suyo, por supuesto). Ingrese a su cuñada porque la despidieron de otro trabajo donde era “tan efectiva” aunque en su empresa siempre este distraída por la competencia y los celos con su esposa. Traiga a su padre jubilado para que “no se aburra” y “se sienta útil” trabajando de cadete para usted.


  • 3. Déjese robar por su mejor empleado, justamente porque es su mejor empleado.
    Aunque el robo sea flagrante, que no admita dudas de quien es su “socio” para los retiros de dinero o de mercaderías. Seguramente es el más dócil, el que no discute, el que conoce toda su vida intima, dentro y fuera del matrimonio. El que tiene las llaves de la Empresa por si usted decide tomarse un día más de vacaciones, o decide quedarse dormido un poquito más, o simplemente usted decide ir al gimnasio antes de la hora de cierre de su empresa.
    No lo despida, porque se puede ofender, o denunciar cosas que sabe, o podrá hacerle un juicio, cuyas costas serán siempre menores a la envergadura del robo (de esto usted no se enterara jamás), pero especialmente la pérdida de confianza.


  • 4. No confíe en los asesores.
    Lo único que desean de usted es sacarle “la platita”. Desconfíe siempre. Sepa que si pretenden trabajar con usted más horas para asesorarle, son solo para engordar sus propios bolsillos. Además tenga en cuente que nunca van a decirle nada nuevo, recuerde que usted se las sabe todas y no necesita ayuda. Acláreles que solo los convocó porque alguien los recomendó demasiado, pero no porque usted está en problemas. Ellos deben ser los últimos en enterarse.
    Cuando, con la ayuda de algún profesional usted haya adelantado, corrido sus paredes o dejó de sufrir, cuénteles que pobre se siente, a tal punto de no reconocerles los honorarios que “pretenden arrancarle” para aprovecharse de que lo saben “todo” acerca suyo.


  • 5. Recuerde que usted es INMORTAL.
    No le explique a nadie de su familia, (los que lo van a heredar, lo quiera o no), acerca de sus inversiones, ni movimientos financieros, ni de las deudas que tiene, ni lo que tiene a cobrar.
    Total, si cuando usted muera, y nadie se entera de sus cuentas bancarias o dinero “off shore”, que se aprovechen los bancos de sus inversiones, y nadie de aquellos que “para ustedes trabajo tanto, que ni me acuerdo de un cumpleaños o un aniversario” se beneficie de lo que usted les faltó en aras de “todo lo que les iba a dejar” después de su muerte. Recuerde no dejar tampoco una llave duplicada de su caja de seguridad del o los bancos con los que opera, y menos que menos un registro de lo que viene prestándole a su hermana, con promesa de devolución. Salvo que realmente decida regalárselo a su hermana, obvio.


  • 6. No permita que nadie le suceda.
    No decida quién va a ser su sucesor, ni corrobore con él o con ella, de que acepta el cargo. Si tiene dos o más hijos que ya se disputan por el actual o futuro poder en la empresa, no laude, no decida. Deje todo para después de su muerte. Total, usted creerá que “se las van a arreglar porque les tiene confianza” y que si deja la bomba activada a usted no le tocará parte del reventón. Goce pensando en el triste recuerdo que dejará de autoritario pusilánime por no haber podido decidir o negociar el futuro de la empresa, porque “a usted después de muerto no le va a importar nada que suceda”. Siéntase contento en el más allá de haber reventado, no sólo a su empresa sino también a su familia. Las próximas generaciones lo tendrán en cuenta, pero no espere que vayan a recordarlo con cariño.


  • 7. Confúndase siempre de su propio lugar, y confunda a sus colaboradores acerca del rol, función y tarea de cada uno.
    Desorganice siempre. De órdenes y contraórdenes. Plantée directivas sin clarificar los roles de cada uno. Usted pensará que confunde, confunde y así dividirá para reinar. Sin embargo, por lo general es porque usted no sabe lo que es una organización. Pero recuerde del peligro de un buen asesoramiento, que puede poner las cosas en su lugar.


  • 8. No consulte con Mentoring Empresario.
    No pida una entrevista sin cargo con el Prof, Ernesto Beibe ni con la Dra. Marianela Ruiz ni nadie de su equipo. Corre el peligro de que su empresa comience a crecer, de que Usted comience a crecer, que su vida se convierta en algo satisfactorio y sin frenos para gozar de su éxitos.


  • Prof. Ernesto Beibe y Dra. Marianela Ruiz
    Mentores
    Mentoring Empresario Continúa...